Reportaje para revista

Mi primera vez 

Nervios incontrolables, mariposas en el estómago, no se puede explicar lo que uno siente esa primera vez,  en que todo gira alrededor de esa persona, pensar que cometerás algún error, o que exista algún momento incómodo y miedo a hablar cualquier incoherencia sólo por temor. Muchas veces puede volver a pasar, pero solo la primera experiencia es la que uno  recuerda por eso lo guarda en el fondo de su corazón como una cajita de cristal en la que incluyen todos esos momentos de los cuales te servirán de experiencia.

¿Sera gusto o presión?, ¿Amor u obsesión?, nada se sabe, hasta que logras pasar la prueba que te desesperaba aquella primera vez, o que en fin, no querías que ocurriera, ¿Sera la misma experiencia para chicos como para chicas?, pues no existe receta perfecta para enfrentar ese montón de sensaciones  y es cuando te das cuenta que es el momento perfecto que estas solo enfrentando quizás uno de tus mayores temores o el momento tan esperado para otro.  

Sudor frío, choque de labios, piel con piel, esa sensibilidad de los roses que nunca nadie los podría explicar, ni aquella persona que lo experimentó con gran intensidad.

Incluso el simple roce, es una formas más sana de expresar aquella sensación que Dios o alguien creo para los humanos y que para muchos es una  de las más grandes encrucijadas que solo un valiente o un buen luchador las sabe sobrellevar, llamado amor.

Uno nunca sabe exactamente el día,  el lugar, ni la hora en que sucederá, simplemente son ocasiones que se dan, en la que las dos personas están de acuerdo, no hace falta un contrato o alguna carta en la que uno deba firmar para cumplir con estas anécdotas que son parte de la vida y de la que nadie se puede evitar, ya que todos en una determinada edad ya sea antes o después siempre pasan por ello.

¿Cómo saber si fue correcto o no?, simplemente cuando alguien te cuenta, no hace falta escuchar el sonido de su voz expresándote lo que siente, basta con mirar sus ojos para saber la respuesta.

El momento en el que llegue

Muchos piensan en el  momento en que den su primer beso o mucho más. En los hombres no es tanta la fantasía, en cambio para las mujeres siempre tiene que ser perfecto. Como nos cuenta Mariana que siempre había soñado en que todo fuera como en los cuentos de hadas, pero que llegada la hora no siempre es así, pero  no importa como sea sino como te puedas sentir.

Edad correcta

No hay una edad determinada para poder, tener relaciones sexuales o dar tu primer beso, pero estamos plasmados en una sociedad en la que tener relaciones sexuales a la corta edad de 15 años es un pecado, o dar un beso que muchas veces son inocentes, por ello es necesario salir de este taboo ya que todo a medida que va transcurriendo el tiempo está cambiando. Aprendiendo a aceptar las transformaciones que pueden llegar a existir en la sociedad sin verlo como algo negativo.

A quien se lo cuento

No sabía que hacer era mi primer beso, ¿se lo tenía que contar a alguien?, o ¿no? Pues recurrí a una persona de confianza, mi mejor amiga y se lo conté, pensé que me diría que éramos muy niñas para esas cosas, ya que teníamos 8 años pero ella me abrazo y me dijo que es parte de la vida y que si me sentía bien de lo ocurrido no importaba, dijo Mariana.

Ahora a sus 18 años nos cuenta sobre su primera experiencia sexual, dijo que no se arrepiente de lo sucedido ya que entregó ese tesoro preciado a su primer amor. No sabía cómo reaccionar ese instante, no sabía que pasaría después de eso, solo pensaba: ¿Estaré haciendo lo correcto?, pero como muchos, no pensó ese rato, no era el momento como para desanimarse, solamente lo hizo y hasta ahora lo recuerda como lo más hermoso del mundo, sobre todo si lo haces con amor.

Decisión correcta

En muchas ocasiones saber escoger es otro de los dilemas que atraviesan los jóvenes, entre muchas dudas y conflictos la experiencia es lo más importante.

Con una sonrisa y mirada perdida, algo avergonzada Patricia nos cuenta que se veía preocupada e indecisa porque no sabía que acción tomar en su primera cita. “Me acuerdo que fue todo un dilema, era una doble sensación, por una parte mis padres que no me daban permiso para poder enamorar, ellos decían que todo llegaría a su tiempo y que con mis 15 años no estaba preparada para todo ello, pero yo pensaba diferente porque sentía que si no experimentaba nunca iba a saber como otras de mis amigas que ya tenían su novio”.

Diferentes experiencias que sin lugar a dudas despiertan el interés en chicas, mientras que otras ya atraviesan otra etapa en sus vidas, tal es el caso de Adriana que se veía indecisa en el momento que se presentó la oportunidad para que pueda enamorar por primera vez. Con una mano en la cabeza y algo pensativa decía, no sé si me gustaba o era la costumbre que hablemos todo el tiempo, pero no me sentía segura de aceptar ser su enamorada, o decirle que no y terminar sin ser amigos, tal vez no estaba del todo enamorada pero lo intenté, contaba Adriana asegurando que fue una linda experiencia y que aprendió mucho de ello.

Buscando al ideal

Al ser uno niño (a) se imagina un ideal el cual seguir, lo mismo sucede cuando quieres dar tu primer beso, uno estructura una persona de acuerdo a su gusto y conveniencia. Pero no todos llegan a  cumplir ese ideal  por muchos motivos.

Es el caso de Luis que contó su prospecto de mujer que tenía desde niño y con la cual daría su primer beso, según pensaba él. Se trataba de una chica rubia de ojos claros y piel blanca como dulce de leche. Cuando dio su primer beso la chica a la que beso no contaba con ninguna de esas características, sin embargo nunca se arrepintió y lo recuerda siempre.

Así mismo, Flavia compartió su primera experiencia donde con su primer enamorado pasó a darse más que un beso de enamorados, dijo que ella tenía desde sus 15 años un modelo de hombre como de las revistas, el estereotipo clásico de toda joven, actores de cine o telenovelas, pero que en la realidad vivió ese sueño porque en la realidad todo cambia. No se desilusionó nunca de lo sucedido, ya que aún sigue enamorando con Kevin, alrededor de 8 años, considerándolo mucho más que un actor de cine o de telenovelas, porque encontró el amor de su vida, le llena de mucha alegría, paz y amor que es lo que siempre esperaba, ahora con una sonrisa picaresca menciona que pensar en esos ideales de hombres es tan solo un recuerdo que tiene de pequeña.

Recuerdo u olvido

La primera vez es sin lugar a dudas el momento decisivo y que marca uno de las experiencias ya se mas bonitas o más desagradables. Chicos y chicas mantienen ese recuerdo o en muchas ocasiones lo pasan desapercibido olvidándolo.  

“Personalmente no me había puesto a pensar en aquella vez, no se simplemente pasó” dijo con algo de despreocupación Cristhian. 

Muchas veces se habla de una linda experiencia como un recuerdo y malas como un olvido y Sebastián nos cuenta que no quiere acordarse de aquella primera vez que salió con la chica que más le gustaba porque no sabía cómo actuar, que decir, o una persona quien le pueda guiar, por lo que toda la cita fue una tortura personal, así lo llamaba y de la cual no quería recordar.

Pero Carla difiere de esta postura porque cree que no siempre las circunstancias harán de una primera cita una mala experiencia, ya que la persona con la que saliste esa vez no fue la correcta o la perfecta para comenzar una relación. Ella dice la primera vez que salió al cine tenía muchas expectativas, pero piensa que es el chico que no lo hizo perfecto aquella ocasión, ya que no se esforzó ni un poco, pero que a pesar de todo lo que ocurrió lo guarda como un recuerdo porque fue una experiencia muy graciosa.

Entre estas y otras historias más, jóvenes de diferentes edades se ven obligados a aprender de las diferentes experiencias que fueron atravesaron a lo largo de su vida, ya que no existe una receta perfecta que defina específicamente cómo actuar, que decir y hacer esa primera vez.